Un símbolo de estatus, una indicación de distinción, y el prestigio de la realeza, los relojes con vestimenta de lujo se han unido a los sofisticados, los ricos y los influyentes, y han sido usados por aquellos que están en la cima de la eminencia durante cientos de años.
El miedo al cuarzo
Una queja común y bulliciosa como resultado de este cambio moderno es el desdén por los relojes de cuarzo, o cualquier otro reloj que no pueda presumir de una herencia de más de 200 años. Aunque se puede justificar la preocupación por priorizar los diseños sobre la calidad del movimiento, la verdad es que hay empresas modernas que hacen cosas emocionantes e innovan para mejorar la fiabilidad de sus mecanismos, prestando tanta atención a la ingeniería como a la apariencia.
La innegable fascinación por la ingeniería de los antiguos relojes mecánicos no es infundada, pero la tecnología existe hoy en día para igualar su integridad en el cronometraje preciso. Sin embargo, sin mayor consideración, los demasiado entusiastas se apresuran a denunciar cualquier reloj que se vea con "cuarzo" escrito. El cuarzo, sin embargo, es indiscutiblemente la tecnología más utilizada en los dispositivos de cronometraje, y la afirmación de que "el cuarzo es malo" es miope. Como todo en la vida, hay grados de calidad, ganados por el tiempo dedicado a perfeccionar un sistema o producto. Hay movimientos de cuarzo hechos con una alta calidad, y NOVE por ejemplo, utiliza los movimientos suizos de Ronda porque proporcionan la libertad de fabricar relojes extremadamente delgados, pero fiables y duraderos. También hizo posible la creación del buceador más delgado del mundo.
Como con cualquier fanático que admira o colecciona productos especializados, hay un agudo sentido de pertenencia, y el amor por las "viejas costumbres" es comprensible. Sin embargo, la realidad de la economía y el mercado de hoy en día hace que sea un esfuerzo admirable para corregir las viejas ideas de lujo y prestigio, para compartir conocimientos con los nuevos aficionados a los relojes, para animarles a tomar decisiones más sabias y a hacer posibles compras de mejor valor, mediante diseños modernos e ideas innovadoras que hacen que el lujo sea un poco más irrestricto.
Hoy en día sólo tiene sentido que los relojeros apunten a un público más joven, manteniendo el contacto con sus estilos de vida, pasiones y medios. Los relojes de vestir siempre han sido una extensión de una personalidad, una imagen, y representan algo profundo sobre cómo esperamos ser vistos. Los modernos relojes de vestir de hoy en día siguen siendo los mismos símbolos de distinción, de moda y de orgullo de la estatura. Afortunadamente, compartir esa pasión hoy en día ya no requiere obtener lo prácticamente inalcanzable.
Hay un sinfín de opciones asequibles ahí fuera para elegir ahora mismo. ¿Por qué no empezar con nuestra propia colección de relojes de fabricación suiza?